El comisario europeo de Ayuda Humanitaria: “Esperamos que el acuerdo permita un aumento sustancial de la ayuda para Gaza y que no sea algo aislado” | Internacional

Las necesidades de Gaza, al borde de la catástrofe, son inmensas. A la espera de que prospere el acuerdo alcanzado entre Israel y Hamás para formalizar un canje de 50 rehenes civiles a cambio de cuatro días de tregua humanitaria y la liberación de presos palestinos, la UE, principal donante para los palestinos y socio comercial de Israel, urge a que el agua, las medicinas, los alimentos y el combustible lleguen urgentemente a la Franja. El responsable de la parte europea de esa gran operación de ayuda, Janez Lenarčič, comisario de Gestión de Crisis y Ayuda Humanitaria, advierte de que garantizar los suministros básicos a la población civil es una obligación para “todas las partes en conflicto”. En su despacho del Parlamento Europeo en Estrasburgo, Lenarčič (Liubliana, 56 años) detalla la respuesta de la UE y habla del futuro. Uno en el que no ve otra alternativa que la solución de los dos Estados: Israel y Palestina.

Pregunta. La situación de Gaza es crítica, recibimos imágenes de los periodistas locales, informaciones de las ONG. Pero, ¿tiene la UE información de primera mano, ojos en el terreno?

Respuesta. Afortunadamente, hemos evacuado al personal de la UE que ha querido salir, pero tenemos en Gaza a nuestros socios humanitarios, que están actuando con heroísmo operando en una situación catastrófica y en condiciones de seguridad muy difíciles. La agencia de la ONU para los refugiados palestinos, el Programa Mundial de Alimentos, la Cruz Roja-Media Luna Roja… Más de un centenar de miembros de estas organizaciones ha perdido sus vidas en Gaza. Además de que cerca de 15.000 palestinos han muerto, entre ellos una proporción muy elevada de mujeres y niños. No ha habido tregua en los intensos bombardeos sobre la Franja, hay ataques y enfrentamientos continuos en torno a instalaciones médicas, que están protegidas por el derecho internacional humanitario.

P. Estamos hablando de un asedio y de una situación extrema para los civiles en la Franja.

R. Estamos hablando de un asedio que se ha mitigado solo parcialmente por la reanudación de algunos suministros de agua y combustible, que no son suficientes para las necesidades humanitarias. Y eso hay que mejorarlo. El Consejo de Seguridad de la ONU adoptó una resolución que exige en términos muy claros pausas y corredores humanitarios y prolongados, de varios días, para permitir la ayuda humanitaria y ha especificado qué debe incluir esa ayuda: alimentos, medicinas, agua, combustible… Las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU son parte del derecho internacional que ya era, además, muy claro antes de eso.

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P. Un derecho internacional vulnerado en este asedio…

R. Sí, se puede poner de distintas maneras: no está en línea con el derecho internacional. Eso lo ha aclarado el Consejo de Seguridad para todos aquellos que necesitaban clarificarlo que sí, que todas las partes en el conflicto, y eso incluye a Hamás y también a las fuerzas israelíes, están obligadas a asegurar el suministro y la ayuda humanitaria. Esperamos que el acuerdo sobre una pausa en las hostilidades que se acaba de alcanzar permita un aumento sustancial en la entrega de ayuda humanitaria hacia y dentro de Gaza. Y esperamos que no sea algo aislado.

P. Al margen de este acuerdo, que habrá que ver cómo se desarrolla, ¿por qué llega tan poca ayuda a la Franja?

R. Debido al bloqueo de Israel, no se pueden usar los puntos de cruce del lado israelí hacia Gaza, lo que significa que solo funciona un cruce, el de Rafah [desde Egipto]. Ese paso tiene una capacidad considerable, uno de estos últimos días han entrado por allí unos 115 camiones con ayuda. Si ese número pudiera acceder cada día, Gaza podría recibir suministros humanitarios sustanciales si los trámites administrativos, incluidas las inspecciones de Israel [a los camiones y los cargamentos] se hicieran con celeridad. Y si no es suficiente ese paso, habría que abrir otro. Que los suministros esenciales lleguen es obligación de todas las partes en el conflicto.

Camiones con ayuda humanitaria esperan para entrar en Gaza este viernes, durante el primer día de tregua pactada entre Israel y Hamás, en el paso fronterizo de Rafah.
IBRAHEEM ABU MUSTAFA (REUTERS)

P. ¿Puede la UE hablar con Israel para que acelere su parte para que la ayuda llegue? ¿Lo está haciendo?

R. Estamos hablando con Israel y ha habido un movimiento positivo desde lo que ocurría los primeros días, donde algunos suministros de agua fueron devueltos. La cantidad de combustible que se permite introducir regularmente en Gaza, por ejemplo, aún no es suficiente. Y es un elemento muy necesario para los hospitales, para bombas de agua y plantas desalinizadoras, panaderías y para las operaciones de las organizaciones humanitarias.

P. La UE habla ahora del día después para Gaza. ¿Cuál será su papel desde el punto de vista de la ayuda y la reconstrucción?

R. Mi responsabilidad es la asistencia de emergencia inmediata y esa es mi prioridad, pero la UE está pensando en los próximos pasos. Necesitamos un cambio radical en los esfuerzos para volver a encarrilar el trabajo en pos de una solución política al conflicto. Esto significa revitalizar y acelerar los esfuerzos, estancados durante mucho tiempo, hacia una solución de dos Estados. Hay consenso sobre ello.

P. La necesidad de Gaza es acuciante y la situación terrorífica, ¿cuál es la situación en Cisjordania?

R. La situación humanitaria en Cisjordania se está deteriorando constantemente, principalmente debido a la violencia de los colonos extremistas y también de las fuerzas de seguridad israelíes. Además, existen restricciones que no permiten la libre circulación de los palestinos, que tienen dificultades para acceder a sus trabajos, o granjas. Israel canceló, además, los permisos de trabajo, que representaban una gran parte de los ingresos de los palestinos. La ayuda de la UE se ha diseñado para que llegue tanto a Gaza como a Cisjordania, aunque ahora la Franja tiene necesidades más urgentes. Pero en vista de la evolución de las circunstancias, tanto la ayuda a desarrollo como la ayuda humanitaria comprometida a los territorios palestinos ocupados tendrán que aumentar.

P. Los países árabes y el llamado sur global han acusado a la UE de tener una doble vara de medir y de tratar, por ejemplo, de forma diferente lo que ocurre en Ucrania por la invasión rusa de lo que sucede en Gaza.

R. Cada conflicto tiene sus propias complejidades. En el caso de Ucrania estamos hablando de una agresión armada por Rusia contra la soberanía de un vecino pacífico. Lo que ocurrió el 7 de octubre fue un ataque terrorista por parte de Hamás, definido como una organización terrorista por la UE, que cometió atrocidades que no pueden justificarse de ninguna forma como resistencia a la ocupación. Cuando la Unión Europea dijo que Israel tiene derecho a defenderse y proteger a su pueblo contra el terrorismo y los ataques terroristas de Hamas, también dijimos que este derecho debe ejercerse de acuerdo con el derecho internacional.

P. Muchos creen, sin embargo, que para la UE no cuentan por igual las vidas de palestinos civiles y las de israelíes o europeos.

R. No estoy de acuerdo en absoluto. La UE ha dejado muy claro, de muchas formas, en muchas ocasiones y desde muchas fuentes, que hay que proteger la vida de los civiles en cualquier conflicto, incluido este.

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By Gladis Covas Pulido

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